La habitación doble tenía mucho estilo y la cama era comodísima. Además, las vistas al embalse desde la habitación eran geniales. El desayuno era completísimo, con muchas opciones para veganos y personas intolerantes a la lactosa. El personal también era muy atento. ¡Y no puedo olvidar mencionar la pequeña piscina que se podía utilizar por la noche, un puntazo!

La única pega fue que nos picaron muchos mosquitos por la zona, pero esto no es culpa del hotel. Además, echamos de menos una nevera común y un hervidor de agua en la sala de estar.

Me encantó la decoración del hotel, todo estaba cuidado hasta el más mínimo detalle. Los espacios comunes eran acogedores y muy bien iluminados, lo cual facilitaba la movilidad de las personas mayores. Además, el hotel contaba con rampas y accesos adecuados, lo cual lo hacía muy fácil de disfrutar para nosotros, los mayores.

Me hubiera gustado que el personal estuviera disponible de manera más constante. A veces, necesitábamos ayuda y no había nadie alrededor para atendernos.

nuestra estancia en riudecanyes fue aún mejor esta vez gracias a casa vella del panta. las vistas al embalse son geniales y la tranquilidad es perfecta para desconectar. ina y su esposo son encantadores y siempre están dispuestos a ayudar. el desayuno es completo y delicioso, con opciones veganas y sin lactosa disponibles. la habitación tenía mucho estilo y la cama era muy cómoda. disfrutamos de la pequeña piscina por la noche y el jacuzzi fue increíble.

a veces el agua de la bañera se desborda y moja el suelo de la habitación.

Siempre vuelvo a este hotel en Riudecanyes porque cumple con todo lo que necesito. Desde la primera vez que me alojé, el personal fue muy amable y me ayudó a conseguir un taxi local. Además, el hotel ofrece Wi-Fi, aparcamiento gratuito, cocina bien equipada, sala de ocio con televisión. No se permiten mascotas ni fumar. ¡Volveré para Navidad!

Lo mejor de nuestra estancia fue la limpieza impecable, las habitaciones amplias y bien equipadas con hermosas vistas. El desayuno, completo y delicioso. El personal fue excepcionalmente atento y servicial.

La primera vez que me alojé aquí, el personal me ayudó a encontrar mi collar perdido. Tiene todo lo que necesito: Wi-Fi, estacionamiento gratuito, hervidor eléctrico, utensilios de cocina, sala de ocio/TV, ping-pong. No se admiten mascotas, no se permite fumar en el lugar. ¡Volveré para Pascua!

Nos hemos hospedado en Casa Vella Del Panta durante unos días y ha sido una experiencia maravillosa. El lugar es precioso, con vistas magníficas y muy tranquilo, ideal para desconectar. Además, Ina y su marido son encantadores, siempre dispuestos a ayudarnos en todo lo que necesitábamos. Los restaurantes que nos recomendaron para comer y cenar fueron espectaculares. disfrutamos del jacuzzi por la noche, ¡fue increíble! En resumen, el trato, el entorno y las comodidades hacen que esta casa merezca mucho la pena.

Lo recomiendo.